FRANCIA


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Bienvenida, Virginia

Llegada de la hermana Virginia en Francia

Alegría en la Casa Madre! 21 de julio de 2017: Sor Virginia de Oliveira de la Provincia de São Paulo regresa a Francia y es recibida con gran alegría por la Hermana Carme, la Provincial de Europa y todas las hermanas presentes en la Casa Madre. ¡GRACIAS Virginia! Gracias también a su provincia natal.                                                        Ver las fotos

Bienvenida, Ivete

Después de unos años en su país, Brasil, tenemos el gusto y la alegría de recibir a Ivete en la Provincia de Europa, su nueva comunidad la Casa Madre.


Alegría de hablar con obispo
Alegría de hablar con obispo
El 29 de julio: mañana en diócesis
El 29 de julio: mañana en diócesis
JMJ Cracovia: 27/07
JMJ Cracovia: 27/07

Castres - Un Juego de loteria

Los miembros de la Asociación de las obras de Emilie de Villeneuve han organizado un juego de lotería para ayudar a la misión de Mekanbo en el extremo nordeste del pais.

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Asanblea provincial de europa : octubre 2014

El 24 de octubre, después de la oración, hemos tenido la intervención del Sr. Iñaki Laskaray que vino de Madrid.

 

El tema fue "Gestión del cambio" a nivel, personal, congregacional y de comunidad. Se puede vivir un cambio por acercamiento o por alejamiento que es generado por dos emociones: amor o miedo.

 

Con talleres prácticos, dos a dos, se hizo el ejercicio de los 2 niveles de escucha: Escucha nivel 1 - cuando hay preocupación sobre la respuesta que se va a dar y se interpreta lo que se dice. Escucha nivel 2 - cuando se centra en lo que dice el otro.

 

 

La tarde terminó con informaciónes sobre la provincia. Por la noche vimos la película "que hice con el buen Dios", que nos dio la oportunidad de una discusión sobre los valores: familia, religión, cultura, mujeres, etc.. Día intenso e interesante.

El sábado 25 se abre con un tiempo de oración sobre el tema de la misión con el acento puesto sobre la esperanza, de la cual debemos ser signos.   

 

La mañana, dedicada a la reflexión en grupo, para empezar a expresar los elementos que pondrán en evidencia las prioridades para la construcción del proyecto de provincia.


Por la tarde, pasamos a una actividad distinta con el testimonio de Hna Inmaculada y de Laure que comparten con nosotras una experiencia vivida  en la  “Red Azul”.

 

Después pasamos a la puesta en común del trabajo de la mañana antes de dar la palabra a Carme que nos transmite algunas noticias de la Congregación.

 

La Eucaristía cierra ese día tan rico de intercambios, que ofrecemos al señor, pues  «Es justo  y bueno darte gracias » decimos en la celebración.

 

Después de la cena, tres espacios son organizados para un tiempo de recreo  en el cual nos damos el placer de estar juntas gratuitamente  jugando a las cartas, dibujando, tocando el piano,  bailando. Terminamos con el oficio de completas.




Mais um dia ensolarado e lindo com o qual somos presenteadas por Deus.  É a comunidade de Redon que nos coloca no clima de silêncio e oração para vivenciarmos esse primeiro momento do dia.

Em grupos por região, fomos convidadas a sintetizar as propostas para o projeto.  Após o almoço, Maria Luiza  Ayres partilhou sobre o processo da canonização de Jeanne Emilie de Villeneuve.


 Laure e Iphigenie apresentaram sua missão junto aos marginalizados da sociedade . Elas trabalham na associação que  ”Para os cativos a libertação”. Fomo convidadas mais uma vez, por região, a finalizar os trabalhos em grupo e a dar sugestões de como querem viver as mudanças na província.


Carma concluiu com algumas informações,  apresentando a equipe ad hoc para ajudar na reorganização das comunidades de Europa. Estes três dias intensos foram coroados com a  Eucaristia na qual Laure Demyer renovou seus votos e Carma fez o envio das irmãs que foram chamadas a viver uma nova missão em outra comunidade,  das que receberam o mandato de animadora da comunidade e da nova  fundação em Paris.



Jubileos 2014 Casa Madre

Este lunes 14 de julio, después de los ejercicios, sobre el tema "al servicio de la fraternidad según la luz del evangelio", vivimos un tiempo fuerte, fraterno, gracias a nuestras hermanas jubilares que nos dan el testimonio de su larga vida de HERMANAS AZULES.

Mientras la asamlea canta ""Si le Père vous appelle… bienheureux êtes-vous!" , las jubilares entran en procesión, con una lucecita, símbolo de la vida que las habita en fidelidad.

Al llegar al pie del altar, se ponen en círculo y cantan en español:

"Heme aqui, Señor, para hacer tu voluntad; heme aqui, Señor."

Justi llama a cada una por su nombre, la hermana contesta "Heme aquí" y entrega su lucecita al celebrante que la pone sobre el altar como para prolongar la ofrenda.

El Altar está rodeado de luz , las hermanas jubilares toman sitio en los dos prmeros bancos a cada lado de la capilla. 

Después de la homilia, con un solo corazón renuevan sus votos, renovacón a la que nos sentimos muy unidas puesto que lo hacemos al mismo tiempo del fondo del corazón.

Durante el ofertorio el sacerdote presenta las ofrendas mientras cantamos: «Entre tus manos esta mi vida, Señor, entre tus manos, pongo mi existir. Hay que morir para vivir, entre tus manos, yo confio mi ser."


Testimonio de hermana Maria Purificación

Testimonio de mi curación,

 

 

Castres, Marzo  2012 –Agosto  2013

  

 « SI  RECIBIMOS EL TESTIMONIO DE LOS HOMBRES, EL TESTIMONIO DE DIOS ES MAYOR » (Jn.1, 5- 9)

 

Humanidad, capacidad, solidaridad, amor, ternura, disponibilidad, siempre con  sonrisas y palabras que animan, puestas por Dios en el corazón de los hombres.

 

Dos meses en el hospital, se dice rápido, a lo que hay que añadir seis semanas de cuidado continuo.... Dios mío, qué tiempo más largo, y a la vez corto, para dar de sí misma lo que el Señor inspira en la oración, de intercesión y de ofrenda. Oración que permite ver a los que nos atienden y a los otros enfermos con un rayo de sol en los ojos, esos ojos que reflejan a veces sufrimiento y angustia y que da mucho que pensar.

 

« AMADOS MIOS, PUESTO QUE DIOS NOS AMA ASI, NOSOTROS TENEMOS QUE AMARNOS TAMBIEN DE LA MISMA MANERA » (Jn.1, 3- 2)

 

Era el mes de marzo 2012;  unos exámenes estaban previstos, por razón de la intervención quirúrgica de una rodilla. Los análisis de sangre  detectan  algo anormal, grave, por lo que la intervención del médico es rápida. Me encuentro en urgencias  en el hospital “du Pays d´Autan” de Castres. En cuanto llego, las máquinas manipuladas por los especialistas se ponen en marcha: ecografía, escáner, uno tras otro, para buscar el mal que reducía mis actividades y me producía un grandísimo cansancio.

 

Después de estos primeros exámenes  me trasladan a un servicio de  medicina  y allí la doctora, con mucha delicadeza y psicología, me anuncia la existencia de un tumor. Y añade: « nada bueno » Su cara acompaña el diagnóstico. Espera mi reacción; yo no digo nada. Me había preparado. Me sentía en paz y serena. El médico de cabecera me había llamado la víspera por la noche, anunciándome la gravedad. Después de su llamada dije a las hermanas: «Seguramente un cáncer, de hígado, de huesos, y pronto ‘adiós’ hermanas ».

 

« VIGILAOS PARA NO PERDER EL FRUTO DE VUESTRAS  OBRAS » (Jn.2, 8)

 

La gracia de Dios me acompañaba, porque si no dije nada, desde el fondo de mi corazón, enseguida le dije Señor: que sea lo que Tú quieras. Si es tu Hora, será también la mia. Estoy dispuesta. En tus manos  encomiendo mi espíritu »  “ Abandono, puro  amor, sólo Dios”  decía nuestra Fundadora, Emilie de Villeneuve.

 

Un cirujano especialista en digestivos rápidamente vino a verme. Pidió que me trasladaran a su servicio  en observación. Aprecié sus cualidades humanas, sus capacidades, su humildad, su gran respeto por  cada enfermo.

 

Para mí es un gran honor testimoniar de él y de su equipo médico. Para confirmar su diagnóstico, me envía a Albi, 40 km de Castres, a fin de realizar una endoscopia, pero ya antes de irme, me confirmó que la intervención correría a su cargo y  tendría lugar el 25 de marzo, fiesta de la Anunciación: « ese día –me dijo-, le quitaré todo eso ». A partir de ahí comenzó un proceso de cuidados y vigilancia que  no puedo definir sino como  actos de amor intenso, que responden a  una vocación especial por la vida. Les debo mucho, en la ofrenda de mi oración, con el pan y el vino eucarístico, no olvido a nadie, creyentes o no.  Cuánto he aprendido de su abnegación y de su presencia tan valiosa; todo ello me da ánimo para seguir luchando.

 

No olvido tampoco a los demás enfermos, tal vez más graves que yo y por eso, me decía a mi misma: Si yo me voy, no dejo a nadie en apuros, pero en el caso de  un padre o una madre  de familia, o un niño, sería más  grave que en mi caso.

 

« PUES SI: EL SENOR ES BUENO. HA HECHO PARA MI MARAVILLAS! »

 

Los equipos de servicio médico estaban atentos en todo momento. Les debo mucho. Un domingo por la tarde, oímos  música a lo lejos, música que se acercaba.... Y al fin, todo el grupo, -Equipo femenino- presente y en servicio esa tarde, entran en mi habitación…  Una de ellas, me coge  las manos y me ayuda a levantarme del sillón invitándome a danzar… y aunque tiemblan las piernas, empieza la danza. Luego viene la foto con el móvil y lo pasan al ordenador, para presentarlo al doctor que  me obliga a caminar, cuando mis piernas no quieren saber nada. Unos días después, me invitan a entonar el cántico de la creación de san Francisco de Asís.  Una vez más, todo el equipo se encuentra en mi habitación. Están contentos  de ver que me recupero y que bromeo, pero necesitaba hacer acopio de fuerza, pues todavía me sentía  muy débil.

 

Al día siguiente  cuando llegó el doctor para su visita cotidiana, le dije: « doctor, estoy ‘flagada’, como se dice aquí »  Y  responde: « Descanse... con todo lo que ha hecho... y ha vuelto a empezar esta mañana... »   « No, no, doctor, esta mañana solo he cantado... »

 

Dije, desde el principio: humanidad. Añadiré: generosidad, delicadeza. El personal de la planta  sabía detenerse en mi habitación, interesándose por el menor signo de tristeza o de alegría. Algunos me conocían porque habían trabajado como yo en el « Hôtel Dieu », hoy día « Villégiale St. Jacques ».  me  llamaban afectuosamente  « hermanita » habíamos vivido momentos felices; recordábamos  las fiestas, las excursiones, las bromas, porque me  las hacían, y más de una, pero  yo se las devolvía cuando se presentaba la ocasión. Algunos decían: «es un torbellino, los días de fiesta de los mayores se lleva a todo el mundo con ella cantando y bailando». Se evocaba la vida de fe, de familia, las fiestas religiosas, las peregrinaciones,  la práctica religiosa, no siempre fácil de conciliar con el trabajo y la vida familiar. Me preguntaban sobre el por qué de mi vocación  religiosa: ¿para huir del mundo?,  ¿cosas de corazón?,  ¿tener hijos, no lo echa en falta?... Les contestaba con toda sencillez y ellos añadían: Rece por nosotros, que no tenemos tiempo de hacerlo con el trabajo y la vida que llevamos...

 

La puerta de mi habitación la dejaban siempre abierta, debido a la gravedad de mi estado. Según ellos no les llamaba bastante, lo cual les permitía asomarse, para ver si seguía con vida, diciéndome algo, para alegrarme o animarme...

 

Pues sí, guardo un recuerdo inolvidable del calor humano y de su ternura. Les decía a menudo: pienso mucho en vosotros. Doy gracias a Dios por ellos, por su maravilloso trabajo; no siempre reconocido, pues hay que decirlo, falta personal. Con mucha sencillez y atención, me ofrecían ciertos cuidados y masajes para vencer el dolor. Eso era un bálsamo para mi corazón.

 

« HIJOS MIOS, NO AMEMOS SOLO CON PALABRAS SINO EN ACTOS Y DE VERDAD » (1 Jn, 3-18)

 

Aquí quiero dar las gracias a mi familia humana y religiosa: A una de mis hermanas, religiosa también y presente a mi lado durante tres meses, atendiendo a todas mis necesidades. A mi comunidad. A una de mis amigas, siempre atenta junto a mí, ofreciendo además su coche para traer a las hermanas cada vez que podía hacerlo y que fueron muchas veces.

 

Debo también toda mi gratitud al « Refuge Protestant de Mazamet » en donde estuve atendida al salir del Hospital de Castres durante seis semanas. Al doctor, al personal, y también a los residentes, quienes, según el médico, sentían que me fuera.

 

« EXPRESAD VUESTRA FE CON  NATURALIDAD Y SENCILLEZ » Emilie de Villeneuve.

 

En ningún momento intenté imponer mi fe. Obré de manera que mi actitud, mis palabras, dieran una nota más.

 

En el mes de febrero 2013, tras un examen « Petscan » en Toulouse, la doctora que me había enviado me recibía en consulta, y  me dijo con una gran alegría: «ya no hay nada, todo limpio, viva su vida !! » Podéis adivinar mi alegría y mi acción de gracias.

 

Algunos días más tarde, en otro examen médico el doctor me dice: « Está usted curada milagrosamente ! » Muy sorprendida, no acierto a decir palabra, mirándome a los ojos  me repite: «Está usted curada, milagrosamente! » Recobrando lucidez, contesto : Gracias, Dios mio !  Sí, doy gracias a Dios por estar curada, y estoy cierta de que lo estoy gracias a la intercesión de Emilie, nuestra fundadora, con la ayuda de todas las oraciones que se han hecho por doquier pidiendo esta curación.

 

Permítanme decir, por último, gracias, mil gracias al cirujano, a los médicos, a todo el personal de los hospitales, a mi familia humana y religiosa y a todos los amigos que se han prestado a ayudarnos, a los miembros de auxilio espiritual a los enfermos, a los que me atendieron en traslados de ambulancia que, sabiendo que era religiosa, me pedían que rezara por ellos. A todos, tan simpáticos, que no paraban de bromear para hacerme sonreír y darme ánimo, sobre todo en los momentos de quimio. Sin olvidar a la Señora “esthéticienne” la cual siempre se esforzaba por conseguir la belleza para todos los enfermos con mucho calor humano.

 

Gracias, mil veces, a todos, a todas. Que Dios os bendiga y os colme de su paz y de su serenidad como lo he sentido yo a lo largo de mi estancia en el hospital para ser atendida.

 « MAGNIFICO ES EL SENOR. TODO  MI CORAZON  PARA CANTAR A DIOS »

 

Sœur María  Purificación

 

 

 

 

Mimi Lacour y Martine Robert
Mimi Lacour y Martine Robert
Françoise de Villeneuve
Françoise de Villeneuve
Hermana Nuria Bayo
Hermana Nuria Bayo

Soeur Núria Bayó y Françoise de Villeneuve pasaron un día compartiendo  con las Señoras de INNER WHEEL, en el hotel Occitan de Castres. El punto central del intercambio fue la Misión de las hermanas de HAITI que la Asociación ha adoptado.

INNER WHEEL Francia-Haïti

 Una conferencia sobre la correspondencia de Léontine con Chateaubriant dada por el Sr. Jean Pierre Gaubert fue muy apreciada. Después de baber hablado de Léontine, ya al final añadió: tenía una hermana llamada Emilie que, se hizo religiosa y fundó una Congregación.
Fué una flor de humanidad para el Tarn y sus hermanas han continuado y continuan como ella,
esta obra de humanización.

Leer el hoy de la MISIÓN>

Emilie: una flor de humnanidad